Cuando un amuleto o talismán se rompe, significa que ya ha hecho su trabajo, no es nada malo. Simplemente, ha absorbido todas las energías negativas que iban dirigidas hacia ti. Lógicamente si ocurre esto, debes deshacerte de él, por mucho que te guste. Puedes desecharlo en la basura o enterrarlo, para que se purifique con las energías de la Tierra.
Por otra parte, si el amuleto o talismán se pierde, no lo encuentras por ningún lado, el significado es que ya no es para ti y necesitas otro distinto. También puede suceder que el amuleto o talismán vuelva a aparecer "como por arte de magia". En este caso, debes hacer caso a tu intuición y decidir si quieres volver a tenerlo contigo o dejarlo ir. Preferentemente se desecha como explicamos más arriba.